-Pidió coherencia con la transparencia que tanto pregona la 4T, y se informara de los antecedentes de esta asociación, pero no dieron respuesta.

Xalapa, Ver., 27 de junio de 2023. Diputados de Morena, aprobaron otorgar en comodato el Auditorio Benito Juárez, ubicado en la ciudad de Veracruz, a una empresa fantasma, pues no hay transparencia, se desconoce quién la representa, y cuándo fue constituida, lo que fue cuestionado por Marlon Ramírez Marín, diputado local integrante del Grupo Legislativo del PRI (GLPRI).

“Pongámonos de lado del pueblo y digamos aquí frente a los medios de comunicación y del pueblo veracruzano, qué empresa es, qué intereses tiene, quién la representa, cuándo se constituyó y las condiciones que le dieron de mejoría en el contrato al Gobierno de Veracruz para que se le entregue este bien público”, señaló durante la Octava Sesión Ordinaria del Segundo Periodo de Sesiones en este Segundo Año de Ejercicio Constitucional de la LXVI Legislatura del Congreso Local.

En su intervención, preguntó al diputado Luis Arturo Santiago Martínez, por qué señaló que se le entregaría en comodato el inmueble a una empresa “socialmente responsable”, y pidió aclarar si ante tal afirmación él conoce, tiene antecedentes y es fiel aval de la empresa a la que se le otorgó el comodato.

“Pido que el diputado Luis Arturo Santiago, o algún integrante de la Comisión que presenta este dictamen, nos pueda dar mayores elementos para conocer de quién es esta empresa a la que se le entregará un bien de estas características, y pido esto con el afán de transparencia que tiene la que nombran 4T, de hacer las cosas bien, de estar del lado del pueblo”, preguntas que no fueron respondidas por el diputado de Morena.

Finalmente, Anilu Ingram Vallines, Arianna Angeles Aguirre y Marlon Ramírez Marín, diputadas y diputado integrantes del GLPRI, votaron en contra del dictamen emitido por la Comisión de Hacienda del Estado de Veracruz, para autorizar al Poder Ejecutivo celebrar contrato de comodato del inmueble de propiedad estatal “Auditorio Benito Juárez”, con una empresa desconocida, una empresa “fantasma”.